La certificación WELL, clave en el ámbito de la arquitectura sostenible, prioriza el bienestar humano en el diseño de espacios interiores. Esta acreditación se enfoca en aspectos cruciales como la calidad del aire, la iluminación adecuada y la acústica ambiental.
En España, y especialmente en Valencia, la certificación WELL está cobrando importancia. Se está convirtiendo en un estándar para proyectos que buscan no solo la sostenibilidad, sino también el bienestar de sus ocupantes.
Este post explorará en profundidad la certificación WELL, su relevancia y cómo está siendo implementada en nuevos proyectos en España.
Definición de certificación WELL
La certificación WELL es una acreditación global enfocada en la salud y bienestar de los ocupantes de edificios y espacios interiores. Esta certificación, liderada por el International WELL Building Institute, establece estándares rigurosos que evalúan cómo los entornos construidos afectan la salud física y mental de las personas.
En la arquitectura moderna, la certificación WELL adquiere una relevancia especial, ya que aborda aspectos críticos como la calidad del aire, el agua, la nutrición, la iluminación, el movimiento, el confort térmico, el sonido, los materiales, la mente y la comunidad. Estos elementos son evaluados exhaustivamente para garantizar que los edificios no solo sean eficientes y sostenibles, sino también que promuevan activamente un ambiente saludable para sus usuarios.
Además, la certificación WELL se alinea con la creciente conciencia sobre la importancia del diseño consciente y responsable. En una era donde la sostenibilidad es crucial, esta certificación impulsa a arquitectos, diseñadores y constructores a considerar cómo sus proyectos pueden contribuir positivamente al bienestar humano y al cuidado del medio ambiente.
Importancia de la certificación WELL:
La certificación WELL es fundamental en la construcción de nuevos edificios, en particular en entornos urbanos como Valencia. Su relevancia radica en:
Mejora de la salud y bienestar: En zonas urbanas, donde los retos ambientales y de espacio son constantes, WELL asegura que los edificios contribuyan positivamente a la salud de sus ocupantes.
Enfoque holístico: Va más allá de la sostenibilidad, abarcando la calidad del aire, iluminación natural, y espacios que promueven el movimiento y la interacción social.
Respuesta a necesidades urbanas: En ciudades densamente pobladas, WELL ofrece soluciones para mejorar la calidad de vida urbana, haciendo hincapié en la importancia de entornos saludables.
Este enfoque es esencial para crear edificaciones que no solo respeten el medio ambiente, sino que también mejoren activamente la calidad de vida en el ambiente urbano.
Cómo obtener la certificación WELL en España
Para obtener la certificación WELL en España se deben seguir pasos específicos y cumplir con criterios rigurosos.
Registro del proyecto: Inicialmente, el proyecto debe registrarse en el International WELL Building Institute (IWBI). Este paso es crucial para iniciar el proceso de certificación.
Documentación y planificación: Se requiere una documentación detallada que demuestre cómo el proyecto cumple con los requisitos WELL. Esto incluye planos, descripciones de materiales y estrategias de diseño sostenible.
Implementación de estrategias WELL: El proyecto debe incorporar las siete categorías WELL: aire, agua, nutrición, luz, fitness, confort y mente. Cada una de estas categorías tiene sus propios requisitos que deben cumplirse.
Evaluación por un WELL Assessor: Una vez completada la construcción, un asesor WELL certificado evaluará el edificio para verificar que cumple con todos los estándares WELL.
Certificación y mantenimiento continuo: Tras la evaluación positiva, se otorga la certificación WELL. Los edificios deben mantener estos estándares, lo que puede requerir evaluaciones periódicas.
Este proceso garantiza que los edificios no solo sean sostenibles, sino también optimizados para el bienestar y la salud de los ocupantes. En Valencia, donde el diseño sostenible está en auge, la certificación WELL está marcando una diferencia significativa en el enfoque de la construcción y el diseño de interiores.
Beneficios de edificios con certificación WELL
Los edificios con certificación WELL ofrecen beneficios tanto para los desarrolladores como para los usuarios finales.
Para los desarrolladores
Aumento del valor del edificio: La certificación WELL puede incrementar el valor de mercado de la propiedad.
Diferenciación en el mercado: Ofrece una ventaja competitiva, destacando el compromiso con la salud y el bienestar.
Responsabilidad social corporativa: Refleja un compromiso con la sostenibilidad y la salud pública.
Para los usuarios finales
Mejora de la salud y el bienestar: La calidad del aire, el agua y la iluminación natural contribuyen a un mejor ambiente de vida o trabajo.
Reducción de costes de salud: La prevención de enfermedades y la promoción de un estilo de vida saludable pueden disminuir los costes sanitarios.
Bienestar psicológico: Los espacios WELL diseñados mejoran el bienestar mental y la productividad.
Estos beneficios demuestran que la certificación WELL es una inversión valiosa en la calidad de vida y la sostenibilidad a largo plazo.
FAQ’s sobre la certificación WELL
¿La certificación WELL es compatible con otras certificaciones como LEED?
Sí, WELL complementa otras certificaciones como LEED, enfocándose más en la salud y el bienestar de los ocupantes.
¿Qué tipo de edificios pueden obtener la certificación WELL?
Cualquier tipo, desde oficinas hasta residencias y espacios educativos.
¿Requiere la certificación WELL renovaciones periódicas?
Sí, para mantener la certificación, los edificios deben pasar evaluaciones periódicas.
¿Cómo influye la certificación WELL en el proceso de diseño arquitectónico?
WELL influye desde la fase de planificación, promoviendo diseños que maximizan la salud y el bienestar, a menudo requiriendo una colaboración más estrecha entre arquitectos, diseñadores y expertos en salud.